En un rincón especial de Savia Xirivella se ha llevado a cabo una actividad artística que ha trascendido las barreras generacionales, tejiendo vínculos entre personas usuarias de la residencia y miembros de la Asociación Cotlas. En esta ocasión única, un nutrido grupo de personas con dificultades para la integración social y discapacidad mental se ha unido a las personas usuarias y familiares del centro para pintar un mural que ahora adorna la parte del jardín exterior de la residencia. Esta iniciativa, que fusiona la experiencia de los mayores con la energía, entusiasmo y vitalidad de los miembros de Cotlas, ha dejado la pintura de un gran mural para siempre en Savia Xirivella.
La pintura, siempre es un medio poderoso de expresión artística, ha servido como medio para unir a estas dos generaciones aparentemente dispares. Bajo la dirección de una talentosa pintora alemana, personas usuarias y miembros de Cotlas se han sumergido en un mundo de colores vibrantes, pinceles y formas geométricas, lo que ha permitido que todos participaran sin limitaciones.
El nuevo mural se ha convertido en una gran obra colaborativa que captura la esencia de la intergeneracionalidad. Desde los trazos minuciosos aplicados por las manos expertas de los mayores hasta la vitalidad expresada en cada pincelada de los jóvenes, el mural es un testimonio visual de la sinergia entre ambos.
El centro ha vivido un día especial con esta actividad y todos los trabajadores se han implicado desde el primer minuto, empezando por su directora, Sandra Orts. “El arte es una gran herramienta para unir a diferentes generaciones y con estas actividades se fomentan vínculos sociales muy agradables para todos”, ha señalado.
Más allá de la expresión artística, la actividad ha tenido profundos beneficios para la salud y el bienestar de los mayores. La pintura y el arte se consideran herramientas terapéuticas poderosas, estimulando la creatividad y proporcionando una vía para la autoexpresión. Los participantes han trabajado su autonomía y funciones cognitivas, liberando tensiones acumuladas y revitalizando sus sentidos. Además, la colaboración intergeneracional ha añadido una capa adicional de estímulo emocional que es fundamental para la salud mental de los mayores. Por otro lado, los miembros de Cotlas también se han beneficiado enormemente de esta experiencia única.
La creación del mural en la residencia de Savia Xirivella ha sido mucho más que un proyecto artístico. La pintura y el arte, como herramientas terapéuticas, han demostrado ser fuentes de alegría y vitalidad para los mayores. Este mural no solo decora la pared del centro, sino que también abre el camino hacia un futuro donde la apertura de las residencias a la comunidad y la conexión entre las generaciones se conviertan en una realidad diaria.
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