Si hay una cosa que ha quedado patente en esta crisis, es la alta vulnerabilidad de las personas mayores ante la misma. Lo vemos cada día en las noticias, son los mayores y especialmente las personas con demencia, los más afectados ante la COVID-19, no solo por su peor pronóstico ante la enfermedad, sino también por ser a su vez más vulnerables ante las medidas de confinamiento a adoptar para evitar su contagio.
Este temor a la dureza de la enfermedad en este grupo poblacional, ha llevado a que las medidas más restrictivas hayan sido las adoptadas para ellos, con el fin de evitar la propagación de la infección en las residencias, alojamientos residenciales, centros sociosanitarios o viviendas asistidas.
Sin embargo, como hemos podido constatar los profesionales que trabajamos en centros residenciales, también es cierto que estas medidas de distanciamiento social pueden inducir a efectos negativos sobre la salud de los mayores en términos de inactividad física, deterioro cognitivo y demencia, fragilidad, soledad o afectación del estado emocional.
Desde los Centros Residenciales Savia, hemos entendido desde siempre el cuidado, como un cuidado global e integral del residente, haciendo hincapié en todos los aspectos humanos y sociales que le rodean. Por lo que había que asumir desde cada centro este reto tan importante con creatividad y profesionalidad.
Han sido muchos los cambios que hemos necesitado introducir para poder realizar las actividades tanto de rehabilitación como de animación y estimulación, a pesar del confinamiento, manteniendo las condiciones de seguridad e higiene necesarias, y poder así mantener el estado de nuestros residentes lo mejor posible.
Para intentar minimizar los efectos psicológicos negativos del confinamiento (como podían ser el empeoramiento en orientación temporal y el aislamiento social), con la ayuda de todo el equipo de los centros (TASOC, psicólogo, auxiliares, recepcionistas…) se han organizado grupos reducidos respetando las medidas de seguridad y utilizando al máximo nuestras terrazas y jardines, para poder mantenerse conectado con el entorno y disfrutar al menos un ratito cada día, del sol y el aire fresco.
Se ha dotado a los centros con materiales para poder realizar ejercicios de rehabilitación o mantenimiento del estado físico en las habitaciones; materiales de entretenimiento individual, como pasatiempos, revistas de actualidad que nos han sido donadas desde editoriales, pequeños aparatos de radio, para poder mantenerse informado o distraído, pedaliers, cintas elásticas, etcétera.
Cuidar a los residentes implica necesariamente cuidar a sus familiares, que también han vivido toda esta situación con angustia y preocupación. Desde el primer día de confinamiento se ha organizado la agenda de llamadas a familiares, informándoles de la situación en la que se encontraba cada Centro Residencial Savia respecto a la pandemia, con total transparencia.
Pero, como “una imagen vale más que mil palabras”, desde los servicios centrales se dotó con rapidez a todos los centros de los suficientes dispositivos electrónicos para poder organizar videollamadas entre los residentes con todos los familiares. Todos, familiares y residentes, recibieron esta práctica con un gran alivio, ya que esto ha permitido mantener este contacto, aunque fuera de manera virtual, rebajando de forma muy significativa los niveles de preocupación y soledad de todos cada uno de ellos.
Han sido muchos los apoyos recibidos, imposible nombrarlos aquí todos. Pero sí queremos agradecer especialmente a todas las personas que nos han escrito a los centros, mediante las “cartas solidarias” para dar apoyo a nuestros residentes y trabajadores. Las hemos leído todas y nos han acompañado mucho.
Pensamos que esta situación, desafortunadamente, ha venido para quedarse, al menos una larga temporada, pero desde los Centros Residenciales Savia haremos todo los posible por seguir cuidando a nuestros residentes y familiares con la máxima calidad posible, innovando y formándonos para poder seguir cuidándoles. En la actualidad desde la Dirección de los centros residenciales Savia se está trabajando para los tan esperados reencuentros y se hará de la forma más segura y cercana posible tanto para nuestros residentes como para sus familiares. En breve nos volvemos a ver.
Marien Garcia, Psicóloga Savia Picassent